La placidez
de un mundo
de gominola
se reflejó
plenamente en sus grandísimos y expresivos ojos mientras yo trataba de dilucidar la verdadera intencionalidad de la petición de aquella pequeña.
de un mundo
de gominola
se reflejó
plenamente en sus grandísimos y expresivos ojos mientras yo trataba de dilucidar la verdadera intencionalidad de la petición de aquella pequeña.
Yo pensaba: Seguro que la niña ha captado mi aire de profe novata y quiere quedarse conmigo. Tan pequeña y tan descarada?
.- Que si profe que me encantan sobre todo los dibujos de animales en especial si son de Disney
Era el primer día de clase de la primera sesión de mi vida en un Aula con los benjamines del Instituto, alevines de 12 años que mostraban un despiste aún mayor que el mío. Les había preguntado qué actividad les gustaría hacer en clase.
Y aquella deliciosa criatura de enormes ojos verdes me aseguraba que a ella le encantaba pintar
Un momento. Pensé. Entonces esta minina es una niña, una auténtica y genuina niña de las que pintan, saltan, juegan, dibujan y hasta puede que siga durmiendo por las noches con la luz encendida. Apuesto a que las Nancys siguen siendo irresistibles para ella. Por tener tenía hasta unas deliciosas pecas a cada lado de las mejillas que resaltaban juguetonas en medio de una palidez enmarcada en oscuros y brillantes cabellos
Mirándola daban ganas de cuidarla como se custodia una planta tierna cuyo tallo es preciso preservar de las tormentas.
Por eso sentía cierta desazón cuando la veía contemplar escenas que chocaban brutalmente impactando contra su tierna fragilidad cuando ella transitaba por aquellos pasillos. Y me irritó especialmente descubrirla jugando con un preservativo cuando cierto partido decidió repartirlos a la puerta del instituto para promover sus afiliaciones en un ejercicio de ignominiosa imaginación.
¡Por favor a ella no!. Dejadla que sueñe con aquel castillo y negocie con las hadas, no le pongais zancadillas a sus duendes ni echéis a la hoguera sus muñecas.
Dejad a los niños que sean niños y a la infancia que prolongue sus sueños de caramelo. La vida es especialmente linda cuando sabe a regaliz.
Ay del que escandalizare a uno de estos.
¡¡Más le valdría que le pusieran una piedra al cuello y le arrojaran al mar!!
¡¡Más le valdría que le pusieran una piedra al cuello y le arrojaran al mar!!
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