Hay un hermoso villancico, el Buen Rey Venceslao, que cuenta la historia de cómo ese buen rey, desafía al duro clima invernal para dar limosna a un pobre campesino en el Día de San Esteban. Durante el viaje, el paje del rey está a punto de rendirse a causa del frío, pero finalmente logra continuar siguiendo las huellas del rey, paso a paso, a través de la profunda nieve.
Pues bien, desafiando los rigores turbios de estos tiempos recios, la indiferencia deshumanizadora que cubre conciencias y la moda de luchar por causas que miran para otro lado, un grupo de escritores y escritoras, hemos querido aunar letras e hilvanar historias para visibilizar la labora de la Asociación Leonesa de Caridad, ASLECA.
De ese empeño ha nacido un libro, Alas de Mariposa, que presentaremos, Dios mediante, el próximo lunes, 27 de diciembre en el Salón de Actos de ASLECA, a las 19 horas. Sus beneficios serán íntegramente destinados a ASLECA.
Reza un conocido dicho popular chino que “el leve aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir al otro lado del planeta”. Pues bien, desde la espesura de los bosques leoneses emerge nuestra pequeña obra literaria cuyo vuelo queremos tornar en alas para que la asociación sea conocida, y pueda seguir realizando su extraordinaria labor solidaria. Se trata de hundir nuestros pies en la nieve para lograr huellas profundas que otros puedan seguir pisando para zafarse de este invierno cuyo frío nos deja ateridos.
Nadie irá a hablarles de su libro, sino del importante , del de los descartados.