Belleza. Quiero captarte en esos instantes para apropiarme de un poco de eternidad...
sábado, 27 de noviembre de 2021
VIGILANTES ENCENDEMOS
Vigilantes encendemos la corona del adviento, renovadas esperanzas en una Navidad que ya asoma por entre los primeros copos de nieve que empiezan a cuajar en nuestras montañas. Al acecho de un tiempo que nos devolverá al corazón de la infancia.
Comienza el tiempo de anhelos y espera, de preparar los aderezos y limpiar los estantes cubiertos de polvo por falta de uso, de recuperar ilusiones y acompasar nuestras frenéticas idas y venidas a la pueril y deliciosa indolencia de los más tiernos de la casa.
Teca desbrozar los caminos de la indiferencia para preparar el encuentro, volver a los tiempos familiares. Desempolvar los afectos enterrados por inexplicables alejamientos. Luchar contra ese invierno prematuro que envejece los corazones. Es tiempo de reclamar el tintineo de los cascabeles del alma, de avivar fuegos y azuzar el fuego de las ilusiones. De recuperar la Fe en lo imposible, de mirar al cielo con los ojos tiernos y limpios del niño que espera. Momento de acompañar en la espera a la mujer que gesta a la vida en su seno. Adviento es tiempo de convocar la brisa de la esperanza de hacer que el viento se arremoline en el alma barriendo las hojas caídas que provocan el hastío. Es tiempo de recuperar ilusiones y disponerlo todo para cuando el venga. Ese niño humilde, príncipe humilde, rey sin corona al que anhelamos vigilantes.
viernes, 19 de noviembre de 2021
EL FONDO OSCURO ESTÁ DISPONIBLE
Cada nueva ley educativa es una vuelta de tuerca hacia el precipicio. Un galimatías sin sentido que afirma una premisa a la vez que se regodea en la contraria. Se acaba de aprobar un decreto que parece querer penalizar el esfuerzo.
#educación #LOMLOE #esfuerzo #esforzarseparaqué #enseñanza #ESO #calidaddeenseñanza #docentesdesanimados #LaNuevaCrónica
miércoles, 17 de noviembre de 2021
LA CASA LEZCANO
La Casa Lezcano.
Primer relato publicado en Masticadores MMmisterio.
Querida Rosa:
Nunca podré agradecerte lo suficiente tu buen tino a la hora de aconsejarnos semejante alojamiento.
Al pasar el umbral de la puerta no esperaba encontrarme un vestíbulo así. En el centro reinaba una soberbia mesa de mármol donde un estilizado jarrón azabache exhibía un ramo de hortensias fucsias. Del techo pendía gran araña luminosa de reluciente cristal de bohemia. Al fondo, una acristalada puerta estilo art decó custodiaba el acceso a un claustro luminoso. Creí ver a una bandada de niños que se llamaban entre sí, y escuché sus nombres: Carolina y Eladio.
Vamos a rifar, le decía la niña a su hermanito:
«Un gato se cayó a un pozo.
Las tripas le hicieron gua.
En el centro del claustro, te encantaría contemplar un par de esbeltas palmeras. Hay también un pozo de cuidada factura con cierto toque de romanticismo. Parece tener aire de misterio.
Rodrigo no ha dejado de entusiasmarse ante cada rincón. Mi simple recién estrenado marido contempla embelesado cada novedad del paisaje con la bobalicona mirada de un niño lento. Ya sabes que Rodrigo nunca se ha caracterizado por su perspicacia. Bueno, supongo que aprenderé a quererle un poco aunque solo sea pensando en la tranquilidad que me va a aportar pertenecer a la familia Montenegro. Mamá está encantada. Y yo a veces me siento como una de aquellas mujeres a las que obligaban a casarse. Quien lo diría, en pleno siglo XXI.
Te echo de menos, querida amiga.
Con cariño, Amanda.
Hola mamá:
No voy a negarte que me aburro algo y eso que acabo de llegar. Aquí el wifi va bastante mal, parece que ha sido desde siempre incluso antes de que él Cumbre Vieja comenzara a vomitar su lava mortífera sobre la isla. Pero no te preocupes. Nos han asegurado que en la Casa Lezcano no existe peligro alguno. El volcán queda muy lejos y Amanda y yo no podemos movernos mucho. Ya sabes que a los recién casados nos gusta más la actividad de paredes adentro. Y me imagino que estás desando que se te llene la casa de nietos.
No sigo, mamá, que luego me regañas por meterme en terrenos pantanosos.
Ya te compraré algún detalle bonito.
No me olvido de ti.
Te quiero.
Tu hijo Rodrigo.
Querida Rosa:
No te lo vas a creer cuando te lo cuente, pero parece ser que en la casa habita un fantasma. Nos ha contado el recepcionista que este edificio data del siglo XVI cuando una familia genovesa conocida como los Lezcano ordenó la construcción del edificio. El padre de familia, con el fin de posicionarse en la zona concertó el matrimonio entre su joven hija Catalina y un viejo terrateniente de la zona. Ella insistía en no casarse, pero nadie quiso escucharla y al final la forzaron a casarse con el anciano. La joven, desesperada, se arrojó al pozo que se encuentra en el patio de la casa.
¿Te das cuenta, Rosa? Ese misterioso pozo que nos recibió aquel día donde los dos hermanitos, Carolina y Eladio jugaban al atardecer.
A Rodrigo también le gusta jugar al anochecer, pero sus juegos no me convencen en absoluto. Me produce rechazo solo con verle acercarse. Con ese aspecto desazonado de niño bobo.
Hola mamá:
No he podido contestarte antes. Entiendo que te preocupes por mi bienestar, pero tanto insistir en la salud mental de Amanda ya empieza a contrariarme. Creía que me conocías lo bastante para saber que darle el alta voluntaria no tuvo nada que ver con nuestro enlace. Su enfermedad mental es algo puntual, son brotes perfectamente controlables por medio de una correcta medicación. La dolencia de mi mujer radica más en su alma que en su mente. Presenciar el suicidio de su madre. Ver morir a su hermano gemelo y compañero de juegos Eladio. Son traumas infantiles que requieren tiempo y una adecuada atención psiquiátrica. Estos días, en el ambiente sereno y tranquilo que rezuma esta casa encontrará el sosiego que su mente ansía.
Mira, ahora mientras te escribo, puedo verla sentada en el pequeño banco del jardín, junto al pozo, con la mirada enredada en el horizonte.
Querida Rosa:
Creo que Catalina quiere pedirme ayuda. Me ha reconocido como a su semejante. Las dos padeciendo matrimonios indeseables. No dejo de pensar en aquella angustia que la llevó a arrojarse al vacío. Parece que ni siquiera tuvo derecho a un entierro digno. La iglesia por entonces negaba el entierro a los suicidas.
Rodrigo no deja de acecharme por la ventana, tras esas gafas ridículas de mediquillo sabiondo. Odio que me mire, y que me toque.
Creo que los niños tienen ganas de jugar con alguien. Unos niños nunca deben permanecer solos.
«Un gato se cayó a un pozo.
Las tripas le hicieron gua.
Arremoto piti poto arremoto piti pa»
Estimada Sra. Olga Montenegro.
Lamentamos comunicarle que el resultado de la autopsia realizada a los cadáveres encontrados en el pozo de la Casa Lezcano ha arrojado que pertenecen efectivamente a su hijo Rodrigo y a su nuera Amanda.
Quedamos a su disposición para aclararle cualquier detalle que precise.
UNA DOSIS DE DOSTOIEVSKY
Uno de los mejores escritores realistas, supo transmitir el valor redentor del sufrimiento como nadie. En el bicentenario de su nacimiento.
Colaboración en la publicación quincenal de “Iglesia en León”
viernes, 12 de noviembre de 2021
DAR QUE HABLAR
Decía D. Miguel de Unamuno que “todo acto de bondad es una demostración de poderío”. El que uno ejerce sobre sí mismo.
viernes, 5 de noviembre de 2021
NOVIEMBRE
La temida muerte, aquella que San Francisco llamada
hermana, tiene la virtud de congregar la vida a su alrededor. Los nietos de los
finados repueblan, por unos días, las calles de los pueblos donde quedaron los
nuestros con sus gritos y algarabías. Y en la tasca del pueblo , vuelve a
escucharse el choque de los vidrios que no se oía desde que marcharon, allá por
agosto. Algunos aprovechan y se quedan a pasar la noche para disfrutar del
magosto. Retornan los paseos vespertinos
y las sombras más tempraneras
proyectadas sobre la carretera que se pasean espectrales en danzas
caprichosas alentadas por la trémula luz otoñal de las desvaídas farolas.
Danzas como las de los recuerdos que ante las tumbas comienzan a convocarse. Los
vivos recuerdan a los muertos, acarician cada uno de esos instantes resucitados
envueltos en pasado. Quizá tenía razón Fraçois
Mauriac cuando decía aquello de que “ la muerte no os roba a los seres
amados. Al contrario, nos los guarda y nos los inmortaliza en el recuerdo.
Quizá sea la vida más ladrona. Ella sí que nos lo roba muchas veces y más
definitivamente.”
Un año más más,
cíclico como los lánguidos vuelos de las hojas otoñales, noviembre se aposenta
en las postrimerías del calendario. Llega el momento de repetir con Bécquer clamaba: ¡Dios mío, qué solos se
quedan los muertos!, menos mal que tú velas sin descanso por ellos.
LA BUENA GENTE
Transcribo un texto de los que emocionan. Ya quisiera haberlo escrito yo. LA BUENA GENTE No te sonríen con blancura dentífrica, desde las ...
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Soy profesora de Religión en un Instituto de Enseñanza Secundaria en la provincia de Valladolid, concretamente en Medina del Campo. El prime...
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Libertador de Nazaret Por Marta Redondo para COPE León. DMV Hay una bonita canción de Adviento que se dirige al Señor como el Libertador...