lunes, 23 de abril de 2018

LIBROS, LIBROS, MÁS LIBROS POR FAVOR




No me libro ni os libero de escribir sobre el día que hoy festejamos librándonos de la libidinosa tarea de acudir al trabajo. 
Puede ser jornada la de aqueste  día para salir a disfrutar de la libertad de contemplar a las mariposas libando, dar rienda a líbido contribuyendo a la inversión de la pirámide poblacional, o tal vez para acudir al Claustro del Palacio de los Guzmanes para ver a los libreros liberando palabras encerradas en esos compendios mágicos que llamamos libros. 
Dicen que cada día se editan en el mundo treinta mil libros. Algunos preconizan que no hay sitio para tanta letra, pero el imperio digital ha venido a rescatarnos de la posesión diabólica a la par que salvadora de la literatura. 
Somos libres para liberarnos de la dictadura de la bibliografía de todos aquellos que escriben y nos reescriben, que piensan y nos repiensan, de los que nos interpelan, incomodan y seducen a ritmo de sintaxis. 
Irresistible. Al final siempre acaba uno sucumbiendo a los encantos de aquel librito perfectamente engalanado que seductor reclama nuestras atenciones al otro lado del escaparate, o cubierto de polvo en la estantería de nuestra biblioteca parece llorarnos haciendo pucheritos mientras nos implora: ¡por Dios! ¡Léeme!.
Feliz día del libro.
Yo hoy por mi parte os libero. Detrás de unas páginas me espera la Libertad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

LA MELENA AL VIENTO

  Los padres marroquís son muy duros con sus hijas, profe. Bajaba la mirada, avergonzada por no saber que más añadir a su mirada velada. Est...