No se por qué hay que esperar a que la gente se jubile, aleje, gane un premio o muera para escribir algo sobre ella. En ocasiones uno recibe el encargo de escribir un panegírico para engrandecer la figura de algún personaje ilustre que provoca admiración por su sabiduría o prestigio profesional.
Pero lo ordinario pasa desapercibido cuando es en realidad lo que construye lo grande.
¡Qué sería de esas grandes y aclamadas gestas sin la necesaria concurrencia de los gestos cotidianos!. Los gestos callados, y no siempre convenientemente valorados, protagonizan en silencio los mejores guiones. No son éxito de audiencias masivas pero producen frutos abundantes como el del grano de mostaza.
Tengo un amigo que ha optado por renunciar o al menos posponer un brillante futuro profesional por atender a los suyos. La sociedad, e incluso el entorno familiar cercano condena ese tipo de decisiones. Aunque el sacrificio - que para él no es tal - traerá sin duda grandes beneficios para su prole menuda que ganará un padre presente en los momentos cruciales de su desarrollo y un confidente seguro para superar las dificultades del día a día. Previa a este gesto hay una elección valiente y arriesgada. Bravo por ti, sólo asumiendo riesgos es como se avanza. Esta vez ha habido ¡vaya si ha habido!¡Chapeau!
Tampoco se muda, Como buena asturiana tiene gran apego a su patria querida aunque es alondra viajera que gusta de visitar múltiples destinos a la búsqueda de conocimientos. Y ella seguramente haya ganado premios dentro de las múltiples aficiones que cultiva, pero su modestia le ha impedido proclamarlos. Tampoco parece estar cercana a la despedida definitiva de este mundo que la fascina. Pero yo quiero hablar de ella porque me lo pide el corazón, y de vez en cuando al corazón hay que hacerle caso.
Sole es desbordante entusiasmo, energía en estado puro que irradia optimismo por donde quiera que camina. ¡Cuántos reencuentros has propiciado querida amiga!.Esa capacidad innata para restablecer lazos, derrochar simpatía, compartir generosamente todo lo tuyo te ha hecho ganarte con honores el titulo de "persona gratísima".
La del sábado fue una hermosa jornada: convertirnos en Astérix y su panda sumergidos en aquellos toneles, visitar el corazón del más innovador tejido empresarial asturiano, perdernos entre la automatización de correos saboreando los tiempos modernos, y volver al mar de la mano de un San Lorenzo que nos recibía en su playa gijonense.
Gracias a ti Teruqui y yo recuperamos nuestro "momento gusanitos" retrotrayéndonos a nuestra más tierna infancia. La cena - como decía Rebeca - fue un momento especial de comunión familiar.
Y una vez más Sole tu fuiste la reina maga artífice de tan felices instantes plenos de emotividad y generosidad a manos llenas. Estar contigo es convertir la vida en fiesta.
Aún nos quedan grandes instantes. La próxima en León.
GRACIAS
PD, En la foto Sole es esa preciosa morena sonriente que lleva una chaqueta verde y pantalón negro. No es la del bolso. La del bolso ya sabéis quien es :-) La rubia alta es mi querida prima Teruqui.
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